Queremos explicar aquí para quien pueda serle útil, la forma en la que nosotros calculamos los honorarios del arquitecto. Como ya sabréis, desde hace tiempo los honorarios de arquitectos, abogados, ingenieros, etcétera, están liberalizados, y desde 2009, con la entrada en vigor de la Ley Ómnibus (Ley 25/2009), los Colegios Profesionales no pueden establecer baremos orientativos de honorarios profesionales.

Pero seamos lógicos, de algún sitio deben salir. Todo trabajo requiere formación previa, conocimientos, inversión, y gastos, además de por supuesto una alta dedicación y un coste de oportunidad elevado, sin olvidar las responsabilidades de nuestra profesión. Es coherente pensar entonces que una baja temeraria en los honorarios debe alertarnos, al igual que unos honorarios desorbitados lo hacen de forma natural.

Ante la carencia de un sistema de valoración de honorarios colegial, la mayoría de los arquitectos no hemos cambiado la forma de hallar dicho valor, pero nos hemos adaptado al mercado actual. Como este artículo no va dirigido a profesionales, intentaremos simplificar.

Los honorarios de arquitectura se basan en un porcentaje del Presupuesto de Ejecución Material (P.E.M.) o Coste de referencia, así pues, un edificio de menor tamaño tendrá menos honorarios que uno de mayor tamaño, por la cantidad de trabajo y responsabilidad que conlleva. Todo esto perfilado siempre con coeficientes para variables de complejidad, estructura, sostenibilidad, detalle, gestión, rehabilitación, etcétera. Ahora bien;

¿Cómo se calcula el presupuesto de ejecución material?

No es un concepto complicado, la idea básica es saber cuánto cuesta en cada momento el m2  y multiplicarlo por la superficie. Pero desglosarlo todo para que sea real, es algo más complejo. El colegio antes hablada de la siguiente expresión:

Cr = M x Cm x Ca x Cc x Ch

Dónde Cr es el coste de referencia; M es un módulo de referencia fijado, es el coste de referencia unitario de la ejecución material de la edificación; Cm es un coeficiente según el tipo de edificación, Ca un coeficiente según el área territorial y geográfica, Cc de calidad de edificación y Ch de rehabilitación. Existiendo también un factor de actualización. Entonces, una vez que tenemos el P.E.M. :

¿Cómo se calcula el porcentaje aplicable que marca los honoraios?

Existía una tabla en el colegio de arquitectos que marcaba, según intervalos en la superficie del proyecto, la expresión que daba ese porcentaje teniendo como una de sus variables la propia superficie. Está tabla aún la usamos, porque creemos que es pragmática, y si atendemos a la actualidad, el gobierno comienza a aprobar los honorarios mínimos para ciertos trabajos de nuestra competencia, como la «Tarifa 1. Certificaciones energéticas de bienes inmuebles» por ejemplo. En dicha tabla los honorarios varían desde C=10 (un 10% del Cr de honorarios aproximadamente para pequeños proyectos) hasta C= 3,4 (un 3,4% del Cr de honorarios aproximados, para proyectos de gran envergadura). Teniendo en cuenta que para reformas o rehabilitaciones se suele aplicar un coeficiente de 1,2 (x1,2) por complejidad, y junto con otros servicios extra prestados en este tipo de proyectos, como infografías, asesoramiento o diseño de mobiliario, etcétera, e incluso otros coeficientes, los honorarios podrían estar entre hasta el 12-14%, todo dependiendo siempre de la magnitud del proyecto, a mayor magnitud, menor % de honorarios.

Obviamente, los honorarios son respecto del trabajo que se va a realizar. Es falsa la creencia de que un arquitecto te cobrará más que un aparejador, o que un ingeniero, en proyectos en los que a ellos se les ha dado competencia, como proyectos de actividad de locales comerciales, reformas, naves industriales, o proyectos de obra menor. Solo que en base a la formación de cada uno, el trabajo que realiza cada cual, debería ser diferente, o al menos el cliente tiene la opción de contratar al arquitecto más funciones de las que puede contratar a un ingeniero o aparejador. Pero por la labor que realice un ingeniero, o un aparejador, el arquitecto te cobrará lo mismo por el mismo trabajo, así de sencillo. Nosotros recomendamos que cualquier proyecto de construcción, se le encargue a un arquitecto, o en su defecto, a un aparejador, porque somos los que estamos formados específicamente para este campo. En otras épocas los arquitectos estaban dedicados a obras de mayor magnitud, porque eran económicamente más rentables, pero a día de hoy el arquitecto realiza cualquier tipo de trabajo relacionado con la construcción; desde informes, periciales, tasaciones, certificados, obras menores, reformas, rehabilitaciones, y un largo etcétera, hasta proyectos que solo nosotros estamos habilitados a redactar, como proyectos de edificación, planeamiento urbanístico, etcétera. Y tenemos la máxima formación y habilitación posible en materia de edificación.

Además los honorarios se dividen en % por fases, quedando por ejemplo de la siguiente manera:

5%       Estudio previo

25%     Anteproyecto

40%     Proyecto básico

70%     Proyecto de ejecución

95%     Dirección de la obra

100%   Liquidación y recepción de obra

Aún así, en encore arquitectos hemos querido ir más allá, en ningún momento hemos dejado de ser coherentes, y hemos valorado nuestro trabajo simplemente en lo que vale, siempre. Por eso para nosotros, mediante lo que hemos expuesto, y los valores de honorarios razonables en el mercado actual, de muchos compañeros, incluso los valores que obtenemos de la experiencia, en definitiva, un estudio de mercado amplio y fundamentado en las prácticas colegiales para la obtención de honorarios, desarrollamos una gráfica ajustada que responde a una expresión matemática mucho más optimizada, ya que refleja la normalización de esas fluctuaciones que se han dado en los últimos años.

De cualquier modo, nosotros somos totalmente transparentes y directos, y siempre justificamos nuestros honorarios, estaremos encantados de explicarte el proceso y el por qué de cada número, aunque sea una cuestión nuestra interna, creemos que la responsabilidad de que la gente no conozca bien nuestra labor, nuestro trabajo, y los honorarios que conlleva para que pueda ser económicamente sostenible, es solamente nuestra, y por eso siempre actuamos así, e intentamos respaldarlo con un trabajo bien hecho.

Así trabajamos en encore arquitectos, siempre intentado ir un paso más allá, hasta en el más mínimo detalle.